Solía evitar conflictos y emociones incómodas, pero eso me dejó sin voz en mis propias decisiones. Con Mireia, entendí que el silencio me hacía daño. Las sesiones online me enseñaron a expresarme sin miedo y a poner límites. Ahora no solo siento que he ganado confianza, sino también la capacidad de llevar una vida más auténtica.